jueves, 27 de septiembre de 2007

Love is a losing game


Y llegará el fin de semana y la ciudad se transformará en un mostrador de carne, en una carnicería de cuerpos transformados por máquinas y botox. Entonces ahí estarán todos, inclusive los que dicen "a mi me importa más una buena conversación"

MENTIRA

Caerá el sol en la ciudad y desearemos todo lo que hay bajo la noche. Pero sólo amaremos todo lo que está bajo tierra: A nuestras abuelitas ya fallecidas, a aquel amigo que murió en un accidente en su moto o al Papa Juan Pablo II.

Tendremos que tatuarnos estúpidos símbolos para no desentonar en las piscinas o en las discotecas, y para poder competir por las niñas y los niños más comerciales de la noche, los descerebradamente hermosos, los estúpidos con cuerpazos de revista, los que no saben quién es ni siquiera Don Quijote de la Mancha, pero si saben que Britney sacó un nuevo single.

Entonces nos dirán: Arrepiéntanse porque odian todo lo que les rodea y entonces tendremos que guardar silencio en espera de unas vacaciones pagadas donde se podrán mostrar en otro lugar los tatuajes que de nada sirvieron en la piscina o en las discotecas.

El que tiene oído que oiga lo que dicen los ángeles cuando se desnudan y se acuestan con nosotros y al dia siguiente ya no los quieres ver porque son demasiado perfectos que aburen.

Yo reprendo y castigo a todos los que amo. El amor si no es para tu familia y amigos, termina siendo un juego de tontos cuando lo quieres dar a alguien que no es tu hermano ni tu amigo .
Entonces puede que seas el único heterosexual en un mundo homosexual para ser al día siguiente el único homosexual en un mundo heterosexual que te dice, la felicidad está en la creación de la familia.

Se abrirá el cielo como en la serie "Angels in América" y veremos los decorados, veremos al doble de Dios, el que hace las escenas peligrosas, el especialista, al que no le interesa amar ni ser amado porque eso es perder el tiempo. Veremos al que dice que para encontrar el amor hay que tener suerte, y con suerte llegarás a los 60 pagandole a los que un dia fueron niños de portada y que ahora sin intelecto y sin una carrera universitaria ofrecen sus cuerpos desgastados por unos cuantos euros.

También veremos a los que tienen vacaciones irse a la playita y venir bronceados como un pancito dulce.
Agosto a veces es una fruta demasiado madura y cada uno de nosotros seremos la zorra de la fábula. Pero de nada servirán las bebidas refrescantes, ni los romances casuales, ni el espadachinesco juego de la seducción en las discotecas y cuanto hueco apestoso a cigarro y semen exista.

El que tiene oído que oiga la verdadera voz, esa es la voz. El que no ha perdido el sentido que lo guarde en sus manos y que se mantenga firme en la idea.

Llegará otro fin de semana todopoderoso que dice: Ven. Y el que oye irá, y el que quiere, tome el agua de la vida traducida en algo que parece desvanecerse. Nadie muere ahogado en su primer mar porque le teme al gran poder de las aguas.

lunes, 10 de septiembre de 2007

EL MUNDO SEGÚN CASCIARI

Con respeto al Sr. Casciari



Leí una vez que la Argentina no es mejor ni peor que España, sólo más joven. Me gustó esa teoría y entonces inventé un truco para descubrir la edad de los países basándome en el "sistema perro".

Desde chicos nos explicaron que para saber si un perro era joven o viejo había que multiplicar su edad biológica por 7. En el caso de los países hay que dividir su edad histórica entre 14 para saber su correspondencia humana.

¿Confuso? En este artículo pongo algunos ejemplos reveladores. Argentina nació en 1816, por lo tanto ya tiene 190 años. Si lo dividimos entre 14, Argentina tiene "humanamente" alrededor de 13 años y medio, o sea, está en la edad del pavo. Es rebelde, pajera, no tiene memoria, contesta sin pensar y está llena de acné (¿será por eso que le dicen el granero del mundo?

Casi todos los países de América Latina tienen la misma edad y, como pasa siempre en esos casos, forman pandillas. La pandilla del Mercosur son cuatro adolescentes que tienen un conjunto de rock. Ensayan en un garaje, hacen mucho ruido y jamás han sacado un disco.

Venezuela, que ya tiene tetitas, está a punto de unirse a ellos para hacer los coros. En realidad, como la mayoría de las chicas de su edad, quiere tener sexo, en este caso con Brasil, que tiene 14 años y el miembro grande.

México también es adolescente, pero con ascendente indígena. Por eso se ríe poco y no fuma ni un inofensivo porro, como el resto de sus amiguitos, sino que mastica peyote, y se junta con Estados Unidos, un retrasado mental de 17, que se dedica a atacar a los chicos hambrientos de 6 añitos en otros continentes.

En el otro extremo está la China milenaria. Si dividimos sus 1,200 años por 14 obtenemos una señora de 85, conservadora, con olor a pipí de gato, que se la pasa comiendo arroz porque no tiene -por ahora- para comprarse una dentadura postiza.

La China tiene un nieto de 8 años, Taiwán, que le hace la vida imposible. Está divorciada desde hace rato de Japón, un viejo cascarrabias, que se juntó con Filipinas, una jovencita pendeja, que siempre está dispuesta a cualquier aberración a cambio de dinero.

Después, están los países que acaban de cumplir la mayoría de edad y salen a pasear en el BMW del padre. Por ejemplo, Australia y Canadá, típicos países que crecieron al amparo de papá Inglaterra y mamá Francia, con una educación estricta y concheta, y que ahora se hacen los locos.

Australia es una pendeja de poco más de 18 años, que hace topless y tiene sexo con Sudáfrica; mientras que Canadá es un chico gay emancipado, que en cualquier momento adopta al bebé Groenlandia para formar una de esas familias alternativas que están de moda.

Francia es una separada de 36 años, más puta que las gallinas, pero muy respetada en el ámbito profesional. Tiene un hijo de apenas 6 años: Mónaco, que va camino de ser puto o bailarín... o ambas cosas. Es amante esporádica de Alemania, camionero rico que está casado con Austria, que sabe que es cornuda, pero no le importa.

Italia es viuda desde hace mucho tiempo. Vive cuidando a San Marino y al Vaticano, dos hijos católicos idénticos a los mellizos de los Flanders. Estuvo casada en segundas nupcias con Alemania (duraron poco: tuvieron a Suiza), pero ahora no quiere saber nada con los hombres. A Italia le gustaría ser una mujer como Bélgica: abogada, independiente, que usa pantalón y habla de política de tú a tú con los hombres (Bélgica también fantasea a veces con saber preparar espaguettis).

España es la mujer más linda de Europa (posiblemente Francia le haga sombra, pero pierde espontaneidad por usar tanto perfume). Anda mucho en tetas y va casi siempre borracha. Generalmente se deja follar por Inglaterra y Después hace la denuncia. España tiene hijos por todas partes (casi todos de 13 años), que viven lejos. Los quiere mucho, pero le molesta que, cuando tienen hambre, pasen una temporada en su casa y le abran la nevera.

Otro que tiene hijos desperdigados es Inglaterra. Sale en barco por la noche, se tira a las pendejas y a los nueve meses aparece una isla nueva en alguna parte del mundo. Pero no se desentiende de ella. En general las islas viven con la madre, pero Inglaterra les da de comer. Escocia e Irlanda, los hermanos de Inglaterra que viven en el piso de arriba, se pasan la vida borrachos y ni siquiera saben jugar al fútbol. Son la vergüenza de la familia.

Suecia y Noruega son dos lesbianas de casi 40 años, que están buenas de cuerpo, a pesar de la edad, pero no le dan bola a nadie. Cojen y trabajan, pues son licenciadas en algo. A veces hacen trío con Holanda (cuando necesitan porro); otras, le histeriquean a Finlandia, que es un tipo medio andrógino de 30 años, que vive solo en un ático sin amueblar y se la pasa hablando por el móvil con Corea.

Corea (la del sur) vive pendiente de su hermana esquizoide. Son mellizas, pero la del norte tomó líquido amniótico cuando salió del útero y quedó estúpida. Se pasó la infancia usando pistolas y ahora, que vive sola, es capaz de cualquier cosa. Estados Unidos, el retrasadito de 17, la vigila mucho, no por miedo, sino porque le quiere quitar sus pistolas.

Israel es un intelectual de 62 años que tuvo una vida de mierda. Hace unos años, Alemania, el camionero, no le vio y se lo llevó por delante. Desde ese día Israel se puso como loco. Ahora, en vez de leer libros, se lo pasa en la terraza tirándole piedras a Palestina, que es una chica que está lavando la ropa en la casa de al lado.

Irán e Irak eran dos primos de 16 que robaban motos y vendían los repuestos, hasta que un día le robaron un repuesto a la motoneta de Estados Unidos y se les acabó el negocio. Ahora se están comiendo los mocos. El mundo estaba bien así, hasta que un día Rusia se juntó (sin casarse) con la Perestroika y tuvieron como docena y media de hijos. Todos raros, algunos mongólicos, otros esquizofrénicos.

Hace una semana, y gracias a un despelote con tiros y muertos, los habitantes serios del mundo descubrimos que hay un país que se llama Kabardino-Balkaria. Un país con bandera, presidente, himno, flora, fauna...y ¡hasta gente! A mí me da un poco de miedo que aparezcan países de corta edad, así, de repente. Que nos enteremos de costado y que, incluso, tengamos que poner cara de que ya sabíamos, para no quedar como ignorantes Y yo me pregunto: ¿Por qué siguen naciendo países, si los que hay todavía No funcionan?